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Podría susurrarte la formula, pero aún así no conseguirías llegar a la cima. Porque, mujer, éste camino no es tan recto; ni tan simple correr todas las piedras que encuentres en él. Simplemente no sabrías como avanzar, te estancarías y quizás hasta perderías el rumbo; aunque te dijera que paso dar, te falta la actitud. Aunque alcances la nota perfecta, te falta la dulzura en los ojos, estás vacía por dentro y te cuesta admitirlo. El arte no es sólo perfección, es amar lo que uno hace, inclusive si eso duele. Pero estás encerrada en tu neurótica idea y no querés salir de ahí.

Estás agazapada, armada hasta la médula. ¿Quién te lastimó tanto como para que llegues a éstas instancias?

Aunque aún no seas consciente de eso, sabés perfectamente que sólo podés llegar hasta allá bajo mi tutela, que tenés que tomar de mí algo que te falta. Te protegería con mi vida si entendieras ésto